Peugeot Rifter Opiniones
heycar opiniones
Escrito por, heycar
- Espacio amplísimo para pasajeros
- Motores económicos
- Un maletero enorme
- Monovolumen con un estilo cuadrado
- Las versiones básicas no tienen sistema de infoentretenimiento
- Se oye ruido del viento en la autopista
Veredicto general
Puede que se base en un monovolumen, pero esconde bien sus orígenes y se merece que lo comparen con los rivales más duros de Ford y Volkswagen.
Sí, no se puede negar que el Peugeot tiene la forma de una caja, pero siempre que evites las versiones básicas o de gama media, el Rifter Allure Pack viene con parachoques del color de la carrocería y llantas de aleación que lo hacen parecer elegante. En cualquier caso, su forma cuadrada merece la pena cuando te metes dentro del coche. La forma vertical del Peugeot Rifter proporciona una posición más alta que en otros coches, lo que te permite tener una gran visibilidad de la carretera y hace que sea fácil maniobrar.
La gran ventaja es, por supuesto, el espacio. El Peugeot Rifter tiene muchísimo espacio para cinco personas y un maletero aún más grande que el de un SUV grande y caro. ¿Quieres más espacio? Te lo dará la versión Long, con una mayor longitud que incluye un par de asientos adicionales en el maletero.
En cuanto a los acabados, nosotros recomendamos la versión Allure. Consigue un equipamiento que gusta bastante, como la pantalla del sistema de infoentretenimiento de 20,3 cm (8 pulgadas) de Peugeot y sensores de aparcamiento traseros. Los acabados de colores iluminan el interior y, por fuera, se consigue un parachoques a juego con el color de la carrocería.
Da el paso y verás que el Peugeot es un coche fácil de conducir. Sus controles son ligeros y el estrecho círculo de giro hace que maniobrar por las calles más transitadas sea fácil. La altura del coche (en comparación con la de un hatchback) hace que pase sobre los badenes sin arañarse. Si conduces mucho por ciudad, también puedes tener una caja de cambios automática de ocho velocidades con cambios suaves.
Puedes elegir entre un motor de gasolina y dos de diésel, pero el de diésel de 130 CV de gama alta es el mejor de todos. Llevará al coche muy bien, incluso a velocidades de autopista, y se las arreglará bien cuando el Peugeot Rifter esté completamente cargado. Viene de serie con una caja de cambios manual de seis velocidades, en vez de una de cinco velocidades como en las versiones más básicas. Esta caja ayuda a mejorar el consumo de combustible y mantiene al motor más en silencio durante una travesía.
Donde más se notan los orígenes de monovolumen del Peugeot Rifter es en la autopista. Se filtra bastante ruido del viento por su forma cuadrada, pero el Peugeot Rifter está disponible con todo el equipamiento de seguridad que se espera en un coche orientado a la familia.
Y eso resume muy bien al Peugeot Rifter. Sí, se basa en un monovolumen, pero eso no quiere decir que tenga los mismos problemas que solía tener en cuanto a rendimiento y niveles de equipamiento. Y si te preocupa el espacio interior, no vas a encontrar muchos coches para la familia que ofrezcan más espacio.
¿El Peugeot Rifter es adecuado para ti?
Si estás buscando un coche orientado a la familia que sea espacioso, entonces el Peugeot Rifter, sin ninguna duda, es el adecuado para ti. Es cierto que no tendrá los acabados interiores elegantes que encontrarás en un Volkswagen Golf, pero el Peugeot Rifter tampoco parece estar mal diseñado, y pronto dejarás de preocuparte por los plásticos interiores cuando veas todo el espacio que ofrece. El Peugeot Rifter tiene un montón de espacio para cinco personas, o siete, si buscas la versión Long, y el maletero es enorme.
Incluso es fácil de conducir, ya que tienes una gran visión de la carretera y unos controles ligeros que hacen que la conducción sea más fácil. Si buscas algo más práctico que un pequeño hatchback para familias y que cueste lo mismo, vale la pena echarle un vistazo al Peugeot Rifter.
¿Cuál es el mejor modelo/motor del Peugeot Rifter?
Si vas a comprar un Peugeot Rifter, lo mejor es comprar la versión Allure con el motor de diésel de 130 CV. Con este acabado se consigue una gran cantidad de equipamiento interior, entre los que se incluyen el aire acondicionado y una pantalla del sistema de infoentretenimiento de 20,3 cm (8 pulgadas) que dispone de Apple CarPlay y Android Auto. Las versiones Allure tienen un aspecto más elegante que las versiones básicas del Peugeot Rifter gracias a sus parachoques con color.
Por otra parte, el motor de diésel de 130 CV es más potente que el motor básico de diésel, pero ofrece un consumo de combustible similar. Este motor también está disponible con una caja de cambios automática de ocho velocidades que elimina el martirio que supone conducir por ciudad.
¿Qué otros coches son similares al Peugeot Rifter?
El Peugeot Rifter trasciende a las clases de coches normales. Por dentro es mucho más grande que un Volkswagen Golf, pero tiene un precio menor debido a un diseño más básico y a un interior sin florituras. Los monovolúmenes como el Volkswagen Touran, por otro lado, pueden igualar al Peugeot en ofrecer hasta siete asientos, pero no puede competir con la capacidad del Rifter en cuanto a su gran capacidad de carga y, aun así, tener espacio para cinco personas.
Para conseguir el mismo tipo de espacio interior que el Peugeot Rifter, habrá que tener en cuenta un SUV grande, que tendrá unos precios de compra y de consumo más elevados. O, por supuesto, podrías ir a por sus equivalentes desde el punto de vista mecánico, el Citroën Berlingo o el Opel Combo Life. Por otro lado, también puedes echarle un vistazo al Ford Tourneo Connect.
Peugeot le ha dado un diseño perspicaz que se centra en el interior i-Cockpit de la empresa. Suena elegante, pero significa que el cuadro de instrumentos se sitúa sobre el volante en lugar de estar detrás de él. ¿Y sabes qué? Va bien. El volante se posiciona más abajo con claridad, lo que permite una visión ininterrumpida de los diales. Ojalá Peugeot pudiera hacer el mismo truco con sus otros coches.
Y no hay mucho más de lo que quejarse. Te gustará el brillo que añade la paleta de dos tonos de colores al habitáculo. La gran consola central hace que el coche parezca consistente y la palanca de cambios queda a la altura de la mano.
Sí es cierto que el asiento del conductor no tiene mucho apoyo lateral (es más bien un sillón cómodo), y no se puede bajar lo suficiente como para ofrecer una posición de conducción deportiva. Pero, asumámoslo, en el Peugeot Rifter no hay nada diseñado para parecer deportivo. Lo que sí se puede hacer es subir el asiento lo suficiente como para facilitar una visión panorámica de la carretera, como la de un SUV. También se puede mover el volante de cuero para alcanzar esa altura.
Si das un paseo, verás que la pantalla del sistema de infoentretenimiento se encuentra en el centro del salpicadero. A la altura de los ojos, hay un botón para regular el volumen del sistema de audio y los botones adecuados para el sistema de ventilación. Todo esto hace que el Peugeot Rifter sea un coche con el que no tendrás que estar trasteando mientras conduces.
Calidad y acabado
Si al sentarte en el asiento del conductor del Peugeot Rifter esperas encontrar una gran cantidad de plásticos suaves, acabados bonitos e iluminación sofisticada, te vas a llevar un buen chasco, porque no tiene nada de eso. Sin embargo, lo que tienes se refleja en su precio asequible y en la astucia de Peugeot con ese presupuesto de diseño.
No es elegante, pero no hay nada en el habitáculo que sea terriblemente desagradable. No hay ningún tipo de metal sin tratar a la vista, que es lo que se suele ver en coches parecidos a un monovolumen como este. Incluso hay algo maravillosamente francés en la tela de las puertas interiores y en los patrones de los asientos de tela.
Vale, pongamos las cartas sobre la mesa. Si quieres sentir el habitáculo del Rifter en todo su esplendor, es mejor evitar las versiones Active y Style. Son las únicas versiones que no tienen una pantalla en condiciones para el sistema de infoentretenimiento. Esa diminuta pantalla LCD y ese cúmulo de botones parecen haberse inspirado en un sistema MIDI barato de los años 90. Además, aunque obtienes un interior bicolor, no es suficiente con un gris y otro gris más claro.
El acabado azul Picasso que se consigue al dar el salto a las versiones Allure es solo el principio, ya que los asientos están acabados en tela Puma a juego, con costuras azules.
Las versiones GT son las siguientes en la gama. Consiguen el color Quente Brown (o bronce) y asientos de tela a cuadros Casual. Ningún Peugeot Rifter da la sensación de ser oscuro por dentro, pero si eliges el techo de cristal panorámico Zenith opcional (no es compatible con la carrocería de 7 plazas y la versión Long), entrará aún más luz.
Sistema de infoentretenimiento
Como ya se ha mencionado, el sistema de infoentretenimiento de las versiones básicas Access y Active no es gran cosa. Tienen una pantalla LCD y, menos mal que tiene pequeños detalles, un puerto USB y Bluetooth. Así que puedes cargar tu dispositivo móvil, hacer llamadas a través del sistema de audio del coche y reproducir música de forma inalámbrica.
Si subes en la gama a las versiones Allure, encontrarás una pantalla del sistema de infoentretenimiento bastante mejor. La pantalla de 20,3 cm (8 pulgadas) es lo suficientemente grande como para que las instrucciones del navegador se vean claras y sean fáciles de seguir. Además, tiene bastantes colores.
Bueno, los menús no son muy intuitivos y la pantalla no es la más sensible, pero no importa porque Apple CarPlay y Android Auto vienen instalados de serie. Con estos sistemas se pueden utilizar los intuitivos menús del dispositivo móvil o saltarte todo este proceso con el sistema de activación por voz.
Con esta estupenda base, el sistema de infoentretenimiento mejorado de las versiones GT es bastante redundante. Añade un navegador por satélite de fábrica (que es peor que el que trae el dispositivo móvil) y un botón de emergencia que puedes usar para pedir ayuda en caso de emergencia.
Espacio y practicidad
Si estás en el mercado buscando un Peugeot Rifter, el espacio y la practicidad serán los aspectos que encabecen tu lista de prioridades. Y no hace falta decirlo, el Rifter se especializa en los dos. Incluso las versiones básicas Active tienen asientos delanteros amplios y mullidos, que parecen sacados de un salón y no de un coche. Además, el conductor también tiene un reposabrazos separado.
El asiento tiene una posición alta, por lo que da un poco la sensación de que las piernas se quedan colgando, pero en seguida te acostumbras, por lo que tienes un montón de espacio. Por otro lado, la altitud del techo del Peugeot Rifter ofrece una gran cantidad de espacio para la cabeza.
Si subes a la versión Allure, el copiloto también consigue un reposabrazos, se añade un apoyo lumbar al asiento del conductor y se obtiene un compartimento de almacenamiento escondido debajo de los dos asientos delanteros. Si saltas a la parte de atrás, te encontrarás con una gran cantidad de espacio, incluso para los adultos más altos. Sin embargo, no a todo el mundo le gustarán los asientos verticales.
Todas las versiones cumplen con sus costumbres típicas de solo tener ventanas que se abren hacia fuera y que solo dejan entrar muy poco aire. Al subir a la versión Allure, se obtienen mesitas plegables en los asientos delanteros y un orificio de ventilación en la parte de atrás.
Las versiones GT lo llevan todo un paso más lejos. En lugar de tener una banqueta trasera con partición 60/40, los coches con el acabado GT ofrecen a sus tres pasajeros traseros sus propios asientos individuales, para que no tengas que preocuparte de que los niños se peleen por el espacio.
Y tampoco tendrás que preocuparte por llevar todo el equipaje porque el maletero del Peugeot Rifter es enorme. La capacidad es de 775 litros y supera sobradamente la capacidad del maletero de un vehículo familiar grande como el Škoda Octavia (640 litros).
La capacidad con los asientos abatidos es aún más impresionante. Los asientos delanteros de las versiones Allure y GT se pliegan para que puedas llevar cargas de hasta 3 m de largo y con una capacidad total de unos alucinantes 3 500 litros.
El enorme portón del maletero del Peugeot Rifter deja una abertura tan amplia que un transbordador estaría orgulloso. El único problema es que la puerta es tan grande que no podrás abrirla si aparcas la parte trasera del coche pegada a una pared. Las versiones GT evitan este problema añadiendo una luneta trasera de apertura independiente, lo que permite introducir objetos más pequeños en el maletero a través de la abertura.
El implacable asalto del Peugeot Rifter a esta sección de practicidad continúa cuando empiezas a hablar de los espacios de almacenamiento. Dependiendo de la versión, es capaz de contar con hasta 186 litros de espacios de almacenamiento más pequeños, lo que supone solo 10 litros menos que la capacidad del maletero del compacto urbano Peugeot 108. Podrás encontrar esos litros de más en compartimientos ocultos bajo el suelo, en la guantera, en el espacio de almacenamiento de las puertas y en las repisas alrededor del techo solar panorámico, si se añade este opcional.
Incluso es fácil instalar un asiento para niños. La puerta trasera corrediza puede parecer y sonar un poco utilitaria (con unas vibraciones metálicas huecas), pero te proporcionan un acceso excelente a la parte trasera y a sus tres puntos ISOFIX. Hay una gran cantidad de espacio para poner un asiento infantil, y la altura del Rifter hace que no tengas que inclinarte tanto como en un coche para la familia más bajo.
Sin embargo, el Peugeot Rifter tiene un truco más bajo la manga: la versión Long. Efectivamente, el Peugeot Rifter también está disponible como un coche de siete plazas de 4,75 m de largo (más que un coche normal, de 4,4 m) con dos espaciosos asientos extra situados en el maletero.
Vale la pena echarle un vistazo a la caja de cambios automática de ocho velocidades si vas a conducir mucho por ciudad. Es un poco lenta al meter las marchas al arrancar, pero en cuanto estás en movimiento, la caja cambia de marcha suavemente y tiene un efecto insignificante en el rendimiento.
Es fácil maniobrar a baja velocidad gracias al estrecho radio de giro del Peugeot, y la parte trasera plana permite discernir con facilidad la parte final del coche al dar marcha atrás.
¿Quieres un poco más de tranquilidad? Bueno, las versiones Allure incluyen de serie sensores de aparcamiento traseros y, desde el acabado Allure, se puede elegir como opcional una cámara de marcha atrás. En realidad funciona bastante bien, porque graba la zona por la que el coche va a maniobrar, juntas las imágenes y muestra el resultado en la pantalla grande del coche.
O puedes dar un paso más allá y pagar por el estacionamiento autónomo opcional para que el coche se acerque a la zona de aparcamiento y estacione en batería mientras solo tocas los pedales.
El balanceo del Peugeot Rifter que apreciamos en la ciudad, se calma en la autopista. Aunque para obtener mejores resultados, es mejor evitar las versiones GT, que tienen ruedas de 43 cm (17 pulgadas), unos centímetros más grandes que las de los otros coches. Si te decides por la caja de cambios automática, también se obtiene el control de velocidad de crucero adaptativo, que puede acelerar y frenar el coche para que se adapte a la velocidad del tráfico.
El Peugeot se las arregla con la conducción normal, pero también es lo suficientemente versátil como para lidiar con casi cualquier cosa que le eche encima una familia.
Vale, no lleva tracción en las cuatro ruedas, pero el ingenioso sistema de tracción Advanced Grip Control de Peugeot está en la lista de opcionales. Este sistema tiene configuraciones para nieve, barro y arena, que evitan que el Peugeot se atasque en superficies difíciles. De hecho, el Rifter lo hace sorprendentemente bien al enfrentarse a terrenos complicados, gracias a su altura y a sus alerones cortos.
¿Quieres llevar un remolque? Bueno, estás de suerte. El enganche de remolque de Peugeot que viene de fábrica viene con un sistema de mitigación del balanceo del remolque que puede detectar cuando se pone rebelde y accionar los frenos del coche para volver a ponerlo a raya. De todas formas, el Peugeot Rifter no puede igualar la capacidad de remolque de un SUV con tracción en las cuatro ruedas, pero el motor de diésel de 130 CV puede remolcar hasta 1 500 kg.
Motores y cajas de cambios
Se puede elegir entre tres motores en la gama Peugeot Rifter: uno de gasolina y dos de diésel. El motor de gasolina 1.2 PureTech de 110 CV ofrece un rendimiento óptimo en ciudad y viene con una caja de cambios manual de seis velocidades de serie, que aporta una mayor flexibilidad que la de cinco velocidades manual que incorpora el motor básico de diésel 1.5 BlueHDi de 100 CV.
Por tanto, en un coche como el Peugeot Rifter, que es probable que esté cargado de gente y equipaje, es mejor el motor de diésel con su empuje añadido, por lo que tu mejor apuesta es el motor de gama alta 1.5 BlueHDi de cuatro cilindros con 130 CV.
Viene de serie con una caja de cambios manual de seis velocidades, lo que lo convierte en un motor más relajado que el diésel básico. También es más suave al acelerar que la versión de gasolina.
Tarda 10,4 segundos en pasar de 0 a 100 km/h, por lo que está lejos de ser un cohete. Sin embargo, ofrece mucha fuerza a un régimen moderado para adelantar a los coches más lentos y para incorporarse en la autopista.
Refinamiento y niveles de ruido
El refinamiento es una área en la que se nota la diferencia entre un Peugeot Rifter y un coche orientado a familias corriente como, por ejemplo, un Volkswagen Golf. La forma cuadrada del Peugeot provoca un notable ruido del viento a altas velocidades y también hay un poco de silbido debido a los grandes retrovisores laterales cuadrados. También es más propenso a que le afecten los viento laterales que a un coche para familias que esté más pegado al suelo.
Tener un interior tan grande también tiene sus desventajas. El enorme interior tiende a reverberar el ruido cuando se pasa por encima de los baches por todo el habitáculo. Aunque no es un problema cuando coge velocidad, porque la suspensión del Peugeot Rifter soporta mejor las irregularidades de la carretera.
Una vez más, el motor de diésel de 130 CV es una gran opción por sí sola. Su potencia añadida no solo le da más tranquilidad a velocidad de crucero, sino que su sexta marcha también ayuda a mantener en silencio al motor. Y, si quieres tirar la casa por la ventana en este sentido, la caja automática opcional de ocho velocidades es aún mejor.
Equipamiento de seguridad
El Peugeot Rifter consiguió cuatro estrellas cuando se sometió a las pruebas de choque del Euro NCAP. Aunque la mayoría de los coches para familia más populares obtuvieron cinco estrellas bajo los mismos procedimientos de prueba, como el Ford Focus o el Volkswagen Golf.
Sin embargo, sigue siendo un coche seguro. Todos las versiones vienen equipadas con todos los tipos de airbags y tienen potentes frenos de disco en las cuatro ruedas. El frenado emergencia automático viene de serie, así que el Peugeot Rifter puede avisar de una inminente colisión frontal y, si no hace nada al respecto, el coche acciona los frenos con fuerza para evitar o limitar la colisión. Este sistema funciona tanto con vehículos como con personas.
También está incluida la alerta de cambio involuntario de carril en la lista de equipamiento de serie. Este sistema detecta si te estás saliendo del carril en una autopista, te advierte y puede corregir la dirección para evitar que te salgas de la línea blanca.
Si pones la atención en la lista de opcionales, encontrarás equipamiento como el sistema de reconocimiento de señales de tráfico. Este sistema lee las señales y muestra la información en la pantalla del sistema de infoentretenimiento del centro del coche, por lo que es fácil seguir el límite de velocidad. El control inteligente de los faros es otra función práctica. No habrá que tener el dedo puesto sobre el botón de las luces como si fueses un vaquero con el gatillo rápido. Hay una cámara en el parabrisas que detecta otros coches y, en consecuencia, cambia las luces.
Hay que decir que los faros halógenos del Peugeot Rifter producen una débil luz amarilla que es bastante oscura si lo comparamos con otro tipo de sistemas multi-LED que ya están disponibles en un hatchback para familias, como el Ford Focus.
Por último, tenemos el sistema de alerta de atención al conductor. Este sistema monitoriza la posición del coche en la carretera a más de 64 km/h y, si detecta que estás dando tumbos en el carril, te avisará de que sería una buena idea descansar.
El motor de gasolina de 110 CV afirma tener un consumo de hasta 6,5 l/100 km según las duras pruebas en el mundo real, por lo que se debería poder alcanzar fácilmente un consumo sobre 7,0 l/100 km.
Por otro lado, el motor de diésel de 100 CV consigue una cifra de 5,1 l/100 km de forma oficial, y apenas hay diferencias con el diésel de más potencia con 130 CV. Ambos deberían consumir 5,7 l/100 km en el mundo real.
El consumo de combustible aumentará de forma insignificante si cualquier versión se empareja con la caja de cambios automática de ocho velocidades de Peugeot. Es un aumento similar al que se obtiene si se escogen las llantas de aleación más grandes de 43 cm (17 pulgadas) en una versión GT. Es interesante ver que si se elige la versión Long de siete plazas en lugar de la Standard corta, no supone ninguna diferencia en cuanto al consumo de combustible.
La versión más popular es la Standard de cinco plazas con el acabado de gama media del Allure, combinada con el motor de diésel de 130 CV y la caja de cambios manual de seis velocidades de Peugeot, que cuesta menos de 22 500 €. Este acabado añade equipamiento útil a la versión básica del coche, siendo lo más importante su pantalla táctil en color de 20,3 cm (8 pulgadas).
Si te quedas con el mismo motor y con la misma caja de cambios, pero subes al acabado GT, el precio se eleva a 24 500 €. Sí, el acabado GT añade más equipamiento, pero mucho de ese dinero también se destina a hacer que el Peugeot parezca más deportivo, lo cual es un ejercicio bastante inútil en un coche tan abiertamente antideportivo como el Peugeot Rifter.
Hay muchísimos chollos en el mercado de segunda mano. Hemos encontrado una versión de 2019 con el tamaño normal, con menos de 5 000 kilómetros, con el acabado Allure y con el motor de diésel de 130 CV y la caja de cambios manual por solo 16 900 €.
Niveles de acabado y equipamiento de serie
El Peugeot Rifter está disponible en seis acabados: Active, Active Pack, Style, Allure, Allure Pack y GT. También se pueden encontrar primeras versiones con los acabados Access, NAV+ y GT Line. No se puede negar que las versiones Active (o Access) son bastante básicas y, por eso, es mejor evitarlas. Los parachoques negros y los acabados de plástico de las ruedas no te invitan a ver el exterior, y pasa lo mismo cuando entras.
En lugar de obtener acabados con colores brillantes a partir de las versiones Allure, las versiones básicas como los Active o Access se conforman con una mezcla de plásticos grises o grises oscuros. También hay que sumarle el hecho de que hay que prescindir de una pantalla del sistema infoentretenimiento a color. Al menos tiene aire acondicionado.
Las versiones Allure parecen mucho mejor definidas porque tienen parachoques del color de la carrocería, mientras que las barras del techo de esta versión facilitan el montaje de una bicicleta o un portaequipajes.
Gracias a los acabados de plástico azules y a una tapicería más elegante para los asientos, el interior también transmite una sensación mucho mejor, y son más prácticos. Se consigue un asiento plegable para el copiloto para transportar cargas largas, mesas plegables en los respaldos de los asientos delanteros y un orificio de ventilación para los pasajeros de la parte de atrás.
Las versiones Allure también tienen sensores de aparcamiento traseros y una pantalla para el sistema de infoentretenimiento de 20,3 cm (8 pulgadas) de Peugeot,
Las versiones GT parecen los más elegantes de todos, gracias a su carrocería y a sus llantas de aleación de 43 cm (17 pulgadas). Por dentro, tienen un acabado de plástico en bronce y tapicería revisada. Además del equipamiento de las versiones Allure, se añaden tres asientos traseros separados, que proporcionan más espacio a los pasajeros.
Las versiones GT tienen la misma pantalla de sistema de infoentretenimiento que las versiones Allure, pero añaden arranque sin llave, retrovisores plegables eléctricamente, climatizador bizona con un ajuste de temperatura para ti y tu copiloto, y una luneta trasera de apertura independiente, que se abre para que puedas meter rápidamente el equipaje pequeño en el maletero.