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26.12.2021

Diferencias entre una furgoneta, un monovolumen y un SUV

Diferencias entre una furgoneta, un monovolumen y un SUV

Los coches son un invento que lleva más de 120 años en existencia circulando por nuestras calles. Aunque en esencia son prácticamente todos iguales en el sentido de que están propulsados por un motor y tienen cuatro ruedas, afirmar esto sería lo mismo que decir que todos los humanos somos iguales porque tenemos un esqueleto y dos pies.

Como con las personas, ciertos coches están mejor adaptados para desarrollar unas funciones mejor que los demás, desde ser ágiles y maniobrables hasta ser robustos o espaciosos. La industria del automóvil ha evolucionado tanto desde sus orígenes que hoy es posible encontrar un vehículo que se amolde a tus necesidades, cualesquiera que sean.

Si estás en esta página, lo más probable es que estés buscando espacio y practicidad. Ya habrás leído nuestra guía para entender los diferentes tipos de siluetas que existen en el mercado y no sabes si decantarte por una furgoneta, un todocamino o un monovolumen. De hecho, es muy posible que no sepas cuáles son sus diferencias concretas y en dónde se comienzan a difuminar las fronteras entre ellos.

SUV o todocamino

El SUV, también conocido como todocamino, es la silueta que más popularidad ha ganado en las últimas dos décadas. Originalmente, son descendientes de los todoterrenos robustos y capaces que, con tracción a las cuatro ruedas, podían acceder a casi cualquier lugar, sin importar si hubiera asfalto o o no. Sin embargo, la gran mayoría de compradores de 4x4 no les daba el uso off-road para el que fueron concebidos y, aunque las ventas eran buenas, se quedaban principalmente dentro de las carreteras.

Esta tendencia fue identificada por los fabricantes, especialmente en el sector del lujo, donde marcas como Cadillac o Land Rover contaban con gran aceptación. A ellos se les sumó rápidamente Mercedes-Benz —que ya producía uno de los mejores todoterrenos del mercado, el G-Wagen—, que comenzó a vender versiones más sofisticadas, enfocadas en el habitáculo y líneas más suaves. Esta decisión resultó ser un éxito y hoy, prácticamente todas las marcas cuentan con un SUV dentro de su gama. Esto es especialmente cierto para constructores que habría sido impensable que los crearan, como Porsche, que descubrió la máquina de imprimir dinero que sería el Cayenne.

Un SUV cuenta con muchas características que lo hacen deseable como coche familiar. El acceso es cómodo al estar en una posición elevada y cuentan con amplios maleteros en los que cabe el equipaje completo de una familia de cinco personas —los más grandes sacrifican cierto espacio para contar con siete plazas—. Además, al provenir de un segmento como el del lujo, para muchos son siluetas a las que aspirar cuando eligen un coche, especialmente su última iteración: los SUV coupé, que cuentan con una línea de techo alargada y fluida (tres ejemplos son los BMW X4 y X6 o el Renault Arkana).

Furgoneta

La furgoneta es el vehículo utilitario por excelencia. Diseñadas para maximizar el espacio de carga y el tiempo de uso, son robustas y duraderas, aunque relativamente espartanas en su interior, salvo ciertas excepciones.

Su silueta suele ser la misma, un gran volumen de carga con poco “morro” para el motor —esto es una herencia de los camiones, que adelantan la cabina para facilitar la maniobrabilidad—, pero es importante distinguir entre tres tamaños disponibles en función del uso que se le quiera dar.

Las grandes, como la Fiat Ducato, Mercedes Sprinter o Volkswagen Crafter, son modelos idóneos para el transporte de mercancías, aunque se pueden adaptar para convertirse en minibuses y llevar muchos pasajeros. Estas, a menos que se tengan ocho hijos o más, no serán necesarias para la mayor parte de las familias, aunque su enorme espacio interior, en el que un adulto puede estar de pie, las convierte en plataformas perfectas para la camperización y llevar la casa a cuestas.

De hecho, la versatilidad de las furgonetas es uno de sus mayores atractivos y casi todos los fabricantes cuentan con acuerdos con terceros que permiten transformarlas en lo que se quiera en el interior, desde talleres móviles hasta pequeños autobuses o apartamentos para viajar.

Las de tamaño mediano son, posiblemente, las más populares en el mercado, ya que aúnan en sí mismas un precio más reducido, un tamaño más manejable y un espacio más que amplio. Ejemplos de estos modelos son la Mercedes Clase V, la Citroën Jumpy, la Peugeot Expert o la Volkswagen Transporter. Estas, además, ya cuentan con una opción de pasajeros directamente de la fábrica, en la que pueden ir hasta siete personas en diferentes configuraciones y son elegidas por muchos ejecutivos como oficinas móviles y cuentan con interiores elegantes y muy capaces de soportar viajes largos.

Finalmente, las pequeñas son las conocidas como derivados de turismo, un segmento especialmente popular en España por su versatilidad y precio, en el que los líderes indiscutibles del mercado son las Citroën Berlingo y Peugeot Rifter, seguidas por las Renault Kangoo y Dacia Dokker. En concreto, los modelos de Stellantis se producen en la fábrica de Vigo y sus líneas son mucho más de SUV que las del Grupo Renault, con interiores que pueden albergar hasta siete pasajeros y con maleteros enormes para su equipaje.

Monovolumen

Finalmente, la última entrada en este artículo son los monovolúmenes, unos modelos que se hicieron muy populares en el mercado en los años ‘80 y ‘90, especialmente para familias con cinco personas o más. Llamados así por contar con una sola línea desde el morro hasta el maletero, estas siluetas cuentan con mucho espacio interior, a menudo hasta siete pasajeros de capacidad.

Sin embargo, la popularidad de los SUV y de las furgonetas para uso familiar ha hecho que estos vehículos hayan perdido paulatinamente su posición en el mercado, con fabricantes llegando a cancelar su producción, como Kia con su Carens o SEAT con su Alhambra; aunque algunos fabricantes siguen apostando por ellos, como Citroën y su Grand C4 Picasso.

Esto puede verse como injusto, pues los dueños de monovolúmenes son compradores muy satisfechos con su compra, que atiende especialmente a criterios racionales, pero las leyes del mercado son las que son y si no se llega a las cifras de ventas necesarias, los proyectos acaban siendo descartados. Además, estas siluetas han sido estigmatizadas en la opinión pública —el mundo audiovisual es en parte responsable de ello— y muchos optan por comprar alguna de las otras opciones ya mencionadas antes, especialmente si el objetivo es poder llevar a siete personas de viaje.

Estas son las principales diferencias entre SUV, furgonetas y monovolúmenes, que son opciones muy interesantes para familias numerosas. En nuestro portal podrás encontrar varios anuncios de todas estas siluetas, así que echa un vistazo y descubre el coche que más se adapte a tus gustos.

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